miércoles, 24 de noviembre de 2010

Kanye West: My Beautiful Twisted Dark Fantasy review


Tal y como decía Chris Rock "man, I love Hip Hop but I'm tiiiiired of defending it". Eso es exactamente lo que siento yo, aquí dispuesto a hablar sobre uno de los artistas musicales con más talento del panorama musical y que más me inspiran actualmente. El rap hace tiempo que dejó de ser un simple estilo musical en el que alguien expresaba chulería a través de un micro. A día de hoy el HipHop ha evolucionado y madurado para convertirse en un estilo musical con mayúsculas, una alternativa real que busca día a día el respeto popular. Y opino que lo está consiguiendo, pero aún hoy escuece soltar en cualquier conversación que el mejor disco que has oído en lo que va de año es de rap. Pero no caigamos en el tópico. Porque esto no es sólo rap, es una odisea musical épica salpicada de pinceladas artísticas preparadas para hacer sentir todo tipo de sentimientos al espectador. Es arte. Es música. Es cine:




Kanye West es como la mayoría de los artistas que se/los consideran genios: o lo odias o lo amas. Su último disco, 808's & Heartbreak, inspirado por las malos momentos por los que estaba pasando en su momento (la muerte de su madre y la ruptura con su novia) produjeron un cambio de dirección en su estilo que mucha gente criticó pero que yo personalmente adoré. En ese álbum se desahogó de todos sus miedos y tristezas a través de melodías melancólicas todas ellas aderezadas con un Kanye que prefería cantar a través de un filtro de auto-tune en lugar de rapear al estilo de la vieja escuela porque decía acertadamente que el rap no puede acotar todos los sentimientos de una persona. Y eso es lo que hace a Kanye distinto de los demás. Él es al HipHop lo que Cristiano Ronaldo al fútbol, su ego y narcicismo le llevan a un nivel de auto-exigencia que hace que no tenga miedo en hacer cosas nuevas y atrevidas por mucho que otros le critiquen. ¿Lo mejor? Que encima lo consigue, convence y vende discos como panes. Maldita sea, hasta puede que éste sea el primer disco que me compre en formato físico desde hace años.

En My Beautiful Twisted Dark Fantasy Kanye West vuelve a las raíces del rap y lo hace por la puerta grande. Bien es sabido que el rapero es un gran seguidor del arte y la moda, con una mentalidad muy abierta y cosmopolita, y nunca antes lo había demostrado tanto en una de sus obras. Desde la portada del álbum al videoclip de POWER (un cuadro vivo) a la película de Runaway, todo el album muestra la intención de contarnos una historia, y sobre todo hacernos sentir algo más que simplemente entretenernos. Empezando con el primer single, POWER, un terremoto hecho canción que sólo podría interpretar alguien que no tiene miedo a gritar al mundo ha vuelto aunque corra el riesgo de quedar como un idiota si nadie le hace caso, algo que no pasa desapercibido en los cantos corales que empiezan en Dark Fantasy, la brillante introducción del álbum que tiene uno de los mejores beats que he oído este año (RZA nunca falla). Pero de todos los temas que hay en el álbum tengo que mencionar All of the Lights, seguramente la mejor canción del disco. Sólo puedo describir esta canción como la épica hecha HipHop, con un pedazo de estribillo interpretado por una inspirada Rihanna (esta chica no para, estribillo que canta, temazo al canto) que acompaña a un Kanye West que vuela por el beat ofreciéndonos un rap desgarrador al que estoy seguro que nadie que tenga oídos será capaz de ignorar. Canciones que te dan ganas de adoptarlas, de hacerles una película sólo para usar al álbum como banda sonora si no fuera porque el mismo Kanye ya lo ha hecho.


Lo que más me gusta de este álbum, y de Kanye West en general, es la demostración constante en cada canción o vídeo que hace de las ganas que tiene por ofrecer algo nuevo y distinto en un mundo musical cada vez más prefabricado y repetitivo. Este álbum podrá gustar o no, pero no dejará a nadie indiferente. Es lo que tienen las obras maestras.

martes, 23 de noviembre de 2010

Televisión en España y EEUU: allí trabajan, aquí juegan.

Estos últimos días ha saltado una noticia bastante llamativa y es que Jesse Eisenberg, el protagonista de The Social Network, criticó duramente al programa de Cuatro EL HORMIGUERO por el trato recbido por estos lares. El vídeo a continuación:



De este vídeo se pueden sacar varias conclusiones: para empezar está claro que tanto Justin Timberlake, Andrew Garfield y nuestro querido Jesse no tenían ni idea dónde se estaban metiendo cuando fueron al Hormiguero. Está claro que el Hormiguero no es un programa típico de entrevistas, y su humor predomina sobre los temas de la entrevista (otra cosa es que tengan gracia pero ahí no me meto). Hasta ahí defiendo a Pablo Motos. Pero ahora hay que pensar en por qué El Hormiguero falló con estos invitados (y muchos otros que nunca dijeron nada porque simplemente les pareció un programa demasiado ridículo como para darle importancia).

Para empezar el simple hecho de que un presentador de televisión a día de hoy no sepa ni siquiera un poco de inglés me parece vergonzoso. Muchos dirán que Conan O'Brien no sabe español, pero es que él no recibe apenas invitados españoles y los que recibe hablan inglés, por lo que no se puede considerar una necesidad. Pero aquí tenemos a Pablo Motos recibiendo cada semana a la flor y nata de Hollywood sin decirles apenas "Hello, welcome to our show". Ver a Pablo Motos hablando como una metralleta al trio de invitados haciendo chistes uno detrás de otro, intraducibles y sin gracia (ahí va una puya, vale) mientras ellos se agarran preguntándose qué está pasando mientras el público ríe los no-chistes mencionados no es mi idea de entretenimiento. ¿Tanto le costaría a Pablo apuntarse a clases de inglés con la pasta que tiene? ¡En unos meses sería capaz de al menos hcer las preguntas en inglés!

Por otro lado está la cultura televisiva de cada país. Y ahí sí que no hay discusión. Estados Unidos tendrá muchos defectos, pero la TV no es una de ellas. Allí las cadenas trabajan como burras para entrener al espectador, piensan a lo grande y no se conforman con el primer guión que escriben. Aquí en España, y esto lo digo con conocimiento de causa, la cadenas JUEGAN a hacer televisión. No piensan en el espectador en sí, sino en la imagen que la cadena va a dar. Eso se refleja en el hecho de que en cualquier talk show americano es el entrevistado el que, a través de sus anécdotas y declaraciones entretiene el espectador mientras que aquí suele ser el presentador el que lleva la batuta del entretenimiento y el entrevistado debe, en su mayor parte, asistir al show como un espectador más.

Yo no me considero mejor que nadie, simplemente tengo mi opinión y no pretendo ofender a nadie si digo que la televisión española me parece cutre, atrasada y una payasada que ya ni siquiera tiene gracia cuando la ves por el filtro de SLQH. Un fiel reflejo de este país en el que cuatro gatos sin ideas se dedican a nutrir de entretenimiento a una población que hace mucho que olvidaron que en otros lugares del mundo existe una televisión de calidad, respetuosa con el espectador, en el que los cambios de programación están justificados y a los profesionales del medio se les deja trabajar como dios manda. Aquí no podemos llegar al nivel de EEUU porque hay lógicas diferencias económicas, pero con lo que tenemos aquí estoy seguro de que se podría hacer otra cosa.

PD: la respuesta del EL Hormiguero, aludiendo al cansancio de Jesse Eisenberg como motivo de su mala experiencia, no hace más que infantilizar más aún la imagen del programa como un niño que se niega a aceptar ninguna culpa. Aunque crean que no han hecho nada malo, deberían simplemente haber emitido una nota de prensa disculpándose e invitándole a pasar otra noche en el programa para tratar de remediarlo. Pero eso es demasiado pedir para unos niños que juegan a hacer televisión.

ACTUALIZACIÓN: dándole vueltas al tema, he de admitir que en la entrevista de O'Brien en cuanto se ponene a hablar de por qué les trataron mal creo se pasan 3 pueblos. Que lo quieran tratar como un asunto de envidia de nosotros a ellos les rebaja por momentos al mismo nivel. Y Jesse, si tan listo quieres ser con tus bromas, por lo menos asegurate de saber historia porque España no participó en ninguna guerra mundial, CATETO. La respuesta de EL HORMIGUERO dentro del propio programa no estuvo tan mal como la nota de prensa: